Una vez decidí hacer un experimento, el cual se trataba de sembrar unos frijoles y observar no solo el tiempo en que tardaría en germinar, también quería observar cuanto tiempo duraría su resistencia contra los patógenos y contra los herbívoros, también intente observar si surgiría el mismo mutualismo entre la planta y la hormiga, incluso si podría tener el mutualismo con otro tipo de insecto (sobretodo carnívoro).
Constantemente las plantas se enfrentan al ataque de patógenos y herbívoros, debido a que no son capaces de alejarse de sus enemigos.
Pero para poder defenderse de estos ataques, las plantas han desarrollado una gran plasticidad fenotípica, la cual consiste en cambiar su fenotipo de acuerdo con sus necesidades actuales.
Nosotros los biólogos estamos particularmente interesados en las estrategias de las plantas, por eso investigamos sus defensas directas, las cuales funcionan generalmente por toxinas, en cuanto de sus defensas
indirectas estas funcionan mediante mutualismos entre plantas y carnívoros, es decir existen cierta interacción entre una planta y un animal animal carnívora lo cual favorece a las defensas de la planta.
Uno de estos mutualismos es de planta-hormiga; este mutualismo permite a la planta defenderse prácticamente contra todos sus enemigos e incluyen varias adaptaciones específicas, las cuales pueden mantener al mutualismo estable y eficiente. Las plantas también utilizan señales volátiles que son emitidas por plantas infestadas o infectadas, provocando que estas respondan adecuadamente a los olores de las plantas vecinas, como resultado esto beneficia a la supervivencia de las plantas en su medio ambiente natural.
Yo como biólogo, botánico y ahora como ecólogo he investigado varios sistemas y mecanismos para entender un espectro amplio de estrategias defensivas que existen en las plantas.
Varios de los cultivos de frijol que se han investigado, tienen como objetivo encontrar las líneas que son resistentes a los patógenos y a las que se les puede inducir fácilmente esta misma resistencia mediante la comunicación entre las plantas.
Algunos de los compuestos volátiles (que son emitidos por una planta dañada o infectada) pueden inducir una expresión de resistencia para las plantas vecinas, también esta registrado que pueden controlar la resistencia sistemática en plantas que ya están localmente dañadas e incluso pueden atraer insectos tanto parasitoides como carnívoros, las cuales sirven como defensa indirecta de la planta.
Hasta hoy en día seguimos buscando los compuestos que las plantas utilizan para desarrollar este fenómeno.
Referencias: http://www.cucba.udg.mx/anterior/publicaciones1/botanica/57.htm.
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